Suzana Duarte se graduó en Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Santa Úrsula, en su natal Río de Janeiro, en 2005. En sus inicios, hizo prácticas y trabajos en diferentes oficinas de interiorismo en Brasil, destacando Bernardes Arquitectura, una importante oficina multidisciplinaria de trabajo autoral en proyectos de variada escala, desde residenciales y comerciales, como restaurantes y hoteles, hasta centros culturales y espacios urbanos. Estas experiencias le permitieron afinar su ojo profesional e ir sumando una sólida base de conocimientos.

En 2010 perfeccionó sus estudios con un postgrado en Diseño de Interiores en PUC, Río de Janeiro, y ese mismo año abrió su propia oficina de arquitectura y diseño interior en Brasil, donde hasta hoy funciona parte de su equipo de diseño. Cinco años más tarde llegó a instalarse a Santiago, donde hizo un magíster en Hábitat Residencial en la Universidad de Chile, y comenzó a hacerse un nombre en el ámbito del diseño de interiores, trabajando tanto para inmobiliarias, como en proyectos residenciales y de uso público.

Toques rústicos y un punto de color

El trabajo de Suzana Duarte está influenciado en cierta medida por el estilo de arquitectura y diseño brasileño. La enorme diversidad y mezcla racial e intercultural de aquel país han cristalizado en un diseño que, en la visión de Suzana, “es muy contemporáneo, con uso de diferentes texturas y elementos design un poco más étnicos y rústicos, y que destaca por tener siempre un punto de color en un trasfondo neutral, que aporta calidez al ambiente”. Para Suzana es un desafío interesante combinar las culturas de Brasil y Chile, a fin de generar proyectos con un poco de los dos mundos.

Su interiorismo es de diseño moderno y funcional, con mucho frescor y tratando de extraer lo más posible del mundo natural. Prefiere materialidades como cueros, maderas, fibras naturales como el lino y el ratán, piedras en bruto; y en los colores, además de los neutros, como beige y gris, le gusta usar azules, verdes y terracota como puntos de color.

Uno de esos proyectos en donde se imprime claramente el estilo elegante y purista de esta arquitecta e interiorista, es en el salón de entrada de un edificio –encargado por una inmobiliaria– donde la calidez de la madera se toma los espacios; en el revestimiento de un gran muro, en el protagonismo de una mesa de centro, y en dos rústicos pisos de mucha personalidad. Estos últimos de la tienda Sierra Muebles, una de las preferidas de Suzana a la hora de elegir mobiliario de maderas macizas con hermosas vetas y terminaciones artesanales que le aportan sencillez y sofisticación. Termina el ambiente un sofá clásico de color hueso en capitoné, una alfombra muy texturada en tonos neutros y, por supuesto, el punto de color situado sobre el muro principal: una imagen doble de un paisaje de intensos rojos de atardecer.

Espacios originales y propios

El interiorismo de Suzana Duarte es en gran proporción a medida, con el diseño y confección de muebles especialmente adaptados a cada espacio y finalidad.
Para ella, es importante incorporar elementos diferenciadores que personalicen los espacios. “La idea es extraer la esencia y personalidad de quien habita el lugar e imprimirla en el ambiente a través de colores, texturas y formas”. Las chilenas Domínguez + Goycolea, con su estilo súper neutro al decorar, son una de sus referentes actuales en el país.

Se define como poco estricta a la hora de marcar un estilo. “En mi trabajo hay mucha conversación con el cliente, y me adapto a su realidad para transformar un espacio en algo bello, a la vez funcional y que le identifique”, cuenta. Pregunta a sus clientes si ellos sacan fotos o si hay alguna ciudad preferida, un objeto o lugar que les guste especialmente, para incluirlo en su espacio y así lograr una mayor sintonía. “Una vez, por ejemplo, armamos una sala de estar en base a una gran foto de la Patagonia que le gustaba mucho al dueño de casa. Ese fue el foco central y a la vez el punto inicial del proyecto”.

La idea es buscar la originalidad del espacio, en base al estilo de vida de cada cual. “Lograr con la decoración un estado de constante transformación, donde siempre hay espacio para que el cliente construya su propia historia”. Esto se refleja en un quincho que Suzana diseñó y construyó en el jardín de una casa de Quinchamalí, para una familia que quería un espacio donde compartir, jugar y reunirse con amigos. “El diseño arquitectónico se hizo respetando el estilo de la casa original, para darle una continuidad, y todo en el interior se hizo a medida, en torno a una mesa de pool de paño rojo, que ya había sido comprada por los dueños”. Entre los muros de hormigón, se aportó calidez con un cielo revestido de tablillas de madera, un largo mesón de bar hecho a partir de un solo tronco, y grandes ventanales para que entren la luz y el verde.

Sentir lo que habitamos

Para Suzana Duarte, es fundamental tener conciencia de nuestros lugares habitados, sentir los espacios. “Vivimos en una era muy acelerada donde copiar y pegar parece resolverlo todo. Yo no hago dos proyectos iguales. Aunque me lo pidan, siempre intento personalizarlo. Cuando se trata de vivir, habitar un espacio, cada proyecto demanda un desafío de creación. Es necesario establecer una conexión con el cliente y eso requiere un enfoque agudo para interpretar su verdadero deseo y que el proyecto no se quede solo en una referencia de internet”.

Una de sus creaciones recientes que más han gustado es un mueble para televisión que diseñó para una casa en La Reina. De muro a muro, sencillo y de líneas simples, con gavetas de madera y dos largas repisas a diferentes alturas; lo que más destaca es una maceta incorporada dentro de la base del mueble, donde un arbusto literalmente “mete la naturaleza a la casa, aportando vida, suavidad y verdor a un espacio moderno”.

A la arquitecta que hay en Suzana le encanta trabajar en proyectos completos, desde el diseño arquitectónico hasta el interior. “Respeto a los interioristas, pero para mí no existe arquitectura sin interiorismo, y no existe interiorismo sin arquitectura”. En su visión, ambos elementos idealmente deben ir de la mano para una experiencia habitacional óptima. Actualmente, está diseñando espacios para la Inmobiliaria Santolaya y trabajando en proyectos particulares como quinchos y zona exterior de casas en Chicureo, remodelación de interiores y decoración de casas y departamentos.

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